‘En la UNAM no cabe el partidismo político’: Enrique Graue
En la actual coyuntura no conviene abrir espacios al proselitismo en la Universidad, afirmó el rector; descarta cambios en las reglas para su relevo
Aunque es importante que la comunidad universitaria participe activamente en el debate político, el proselitismo partidista no tiene cabida en la UNAM, afirmó el rector Enrique Graue.
En entrevista con Excélsior, señaló que albergar ese tipo de manifestaciones políticas no es correcto porque generan polarizaciones, las polarizaciones derivan en inseguridad y la inseguridad violenta la vida universitaria.
Graue celebró la cancelación de un foro programado ayer en la Facultad de Economía al que estaban invitados funcionarios de la 4T.
No tengo ningún problema con que se discuta un programa de gobierno, unas propuestas de gobierno; si los estudiantes quieren seguir a alguien me parece bien, así es la Universidad, así tiene que ser, pero convertir los auditorios en centros de partidismo político no es bueno, no es conveniente y creo que lo entendieron”, sostuvo.
A dos meses y medio de terminar sus ocho años de rectorado, Graue reconoció que la UNAM podría entrar en conflicto ante el riesgo de grupos desestabilizadores. Rechazó que sea momento de cambiar las reglas de la sucesión, como han planteado algunos universitarios.
Admitió que deja pendientes como un mayor combate a la violencia de género y afianzar la mezcla de la educación presencial con la híbrida.
‘no será sede de partidismos’: rector de la UNAM
Afirma que si estudiantes, trabajadores y personal académico participan activamente en política, no quiere decir que se hagan en la institución manifestaciones militantes, porque generan polarizaciones y éstas crean inseguridad, lo que a su vez violenta la vida universitaria
En los auditorios e instalaciones de la UNAM no caben actos de partidismo político, advierte el rector de la UNAM, Enrique Graue.
Creo que en la Universidad es muy importante que estudiantes, trabajadores y personal académico participe activamente en política, lo cual no quiere decir que se hagan aquí manifestaciones políticas, porque éstas generan polarizaciones y las polarizaciones generan inseguridad, y la inseguridad violenta la vida universitaria”, dice.
Graue sostiene, en entrevista con Excélsior, que en la actual coyuntura política rumbo a 2024, la UNAM debe propiciar que los estudiantes y toda la comunidad participe activamente en el proceso electoral, pero no sería conveniente que la máxima casa de estudios sea un campo de lucha entre partidos.
Pero sí, por supuesto, de debate político”, acota.
A 2 meses y medio de dejar el cargo al frente de la Universidad Nacional, tras 8 años de rectorado, Graue plantea que el proceso de sucesión tiene que ser terso, pues reconoce que la Universidad, “sí podría entrar en conflicto”.
Bueno, hay grupos que siempre pretenden desestabilizar, no es nada más en este momento.
Por supuesto que, en los momentos, en los tiempos que vivimos, lo que le preocupa al rector es la desestabilización del proceso”.
¿De quién puede ser? Pues de todos los grupos que pueden, eventualmente, tener interés, no del Estado. Ahí yo estoy convencido de lo que dijo el señor Presidente, de que no se metería en este proceso; la verdad confío plenamente en eso. Y creo que aparte de que lo dice de todo corazón, porque cree y conoce la Universidad”, asegura.
En este contexto, Graue celebra que el Foro Universitario El Derecho a la Ciudad, al que asistirían este miércoles el vocero de la Presidencia, Jesús Ramírez Cuevas, así como de la alcaldesa de Iztapalapa, Clara Brugada Molina, haya sido cancelado.
Me da mucho gusto que se haya cancelado. Yo no tengo ningún problema con que se discuta un programa de gobierno, unas propuestas de gobierno, bueno, pues finalmente si los estudiantes quieren seguir a alguien me parece bien, así es la Universidad, así tiene que ser, pero convertir los auditorios en centros de partidismo político; no es bueno, no es conveniente y creo que lo entendieron”, infiere.
AMENAZAS
Desde el sexto piso de la Torre de Rectoría, el jefe nato de la UNAM confiesa que al menos tres veces ha sentido amenazada la autonomía de la Universidad.
Hubo un primer momento cuando desapareció accidentalmente la fracción tercera del Artículo Tercero Constitucional. Y ahí sí sentí la urgencia de actuar; y lo hice así, el entonces secretario de Educación, Esteban Moctezuma, fue muy receptivo y se corrigió rápidamente el problema, y se me dio una explicación que, para mí, fue suficiente. Y ha habido un par de iniciativas de diputados de Morena para modificar la Ley Orgánica”, detalla.
–Hay en el gobierno federal y en el gobierno local muchos universitarios, empezando por el Presidente de la República, pero incluso activistas universitarios, integrantes del CEU: Claudia Sheinbaum y Martí Batres, por ejemplo.
¿La presencia de tantos unamitas en los niveles de gobierno ha beneficiado o ha perjudicado a la máxima casa de estudios?
–A ver, vamos a ponerlo diferente. La relación con el Gobierno de la Ciudad de México ha sido siempre espléndida. La seguridad de la Universidad, que ha venido mejorando en forma sustancial, en buena medida se debe a la estrecha colaboración que se ha tenido con las instancias de seguridad de la Ciudad de México. Entonces, la relación ha sido buena.
Con Martí Batres, por supuesto, un muy distinguido universitario, tenemos una relación fluida y una comunicación directa”.
–¿Y con el gobierno federal?
–Yo creo me llevo bien con todos. Digo, no a todos los secretarios los trato periódicamente, obviamente por la naturaleza de sus propias funciones, a veces no tienen tanto que hacer por la Universidad. Tal es el caso de la Secretaría de Marina, la Secretaría de la Defensa Nacional.
Pero vamos a decir que con todas las instancias, las distintas secretarías y ministerios del gobierno federal, el trato es muy bueno, hacia el secretario de Hacienda, hacia la Secretaría de la Función Pública, hacia la Secretaría de Educación, hacia la Secretaría del Trabajo, hacia la Secretaría de Gobernación. Y como usted dijo, pletórica de universitarios, entienden y quieren mucho a su Universidad”.
–¿Cómo es su relación con el Presidente de la República? ¿Hay relación directa con él?
–A ver, yo me he entrevistado con él en algunas ocasiones; ya hace tiempo que no lo veo, soy muy claro en ello, en privado. Pero lo hicimos en el pasado. Lo he visto recientemente en actos públicos y nos saludamos con gran… él hacia mí con gran cortesía y yo con todo respeto siempre.
–¿Por qué no se han reunido? ¿Se fracturó en algún momento la relación?
–No se ha presentado la ocasión. Yo no pretendo molestarlo cuando no tengo asuntos que realmente pueda solucionar con las otras partes del Poder Ejecutivo, las secretarías de Estado.
En la medida que puedo resolverlo con ellas, pues entonces para qué molestar al señor Presidente”.
–Siempre, señala, escucha la opinión del Presidente, aunque a veces no la comparte.
–El Presidente tiene todo el derecho a manifestar lo que él piensa; yo respeto su opinión como tal.
Sobre su visión del país, Graue observa que hay grandes pendientes en todos los renglones.
Hay que entender también las grandes dificultades económicas que ha atravesado el país; recientemente una pandemia, una guerra, con todos los problemas de suministro y los problemas económicos que trajeron. Entonces es un país con conflictos, con inseguridad, esto es clarísimo. Y esta inseguridad crece en la impunidad.
Entonces, yo creo que seguridad, Estado de Derecho, cosas que son muy importantes para la Nación y para todos los ciudadanos, y yo me incluyo en ellos y tenemos que resolver los problemas poco a poco”.
LOS PENDIENTES.
Tras dos rectorados, Graue tiene claro que la UNAM siempre tendrá pendientes.
Enumera, entre las cosas que tendrá que afianzar y consolidar la persona que lo suceda en el cargo, todo lo que tiene que ver con la normatividad para que la Universidad pueda impartir, cada vez más, y en forma suficiente, la educación presencial mezclada con la híbrida.
Reconoce que la violencia contra las mujeres es una batalla que aún no ha concluido.
Es parte de una cultura patriarcal despreciable, pero que tendremos que seguir encontrando las mejoras formas. Hemos hecho ajustes, primero a los protocolos, ya van varios que van mejorando. Al Tribunal Universitario lo hicimos paritario; hemos creado una defensoría específica, ampliando soluciones para atender los casos. Ha crecido, por supuesto, el número de abogadas y psicólogas para atender y acompañar a las mujeres agredidas. Y es crear las mejores condiciones, sin violentar contratos, que tenemos y dando siempre justicia. Aquí siempre hay que escuchar”, comenta.
LOS MÉDICOS
–¿Es momento de una rectora? Se lo pregunto porque, en este momento, en el país tenemos a tres mujeres que, por primera vez en la historia, podrían convertirse en presidentas. ¿Ve este escenario factible para la Universidad, en este proceso?
–Siempre ha sido el momento, desde hace tiempo, de que sea una mujer. Pero yo creo que esa decisión le toca a la Junta de Gobierno. Yo tengo la impresión de las aspirantes que yo conozco, serían también muy buenas rectoras, como los aspirantes, que también conozco, serían buenos rectores. Yo creo que esto dependerá del proyecto de trabajo que presenten; déjeme ser más claro: no es un problema de género. Es un problema de cómo percibe la Universidad, qué proyecto presentan para continuar creciendo. Y yo creo que por ahí es donde está la verdad de la resolución, argumenta.
–Veinticuatro años de médicos al frente de la UNAM ¿Qué le han dejado los médicos a la institución?
–A ver, qué le han dejado a la Universidad, no los médicos, sino estos tres rectorados. Yo creo que la Universidad ha crecido consistentemente desde los momentos en que el doctor (Juan Ramón) De la Fuente tomó en condiciones muy difíciles a la Universidad y la levantó, la vino a consolidar (José) Narro, y yo he procurado hacerla crecer también.
Alguna virtud, pues yo creo que los médicos sí tenemos una mezcla entre las ciencias y humanidades que es interesante para poder tomar decisiones”.
NO ES MOMENTO DE CAMBIAR LAS REGLAS DEL JUEGO
El oftalmólogo, elegido por primera vez en 2015 para dirigir los destinos de la Universidad Nacional, considera que el proceso por el que se nombra actualmente rector no debe cambiar, aunque prefiere evitar hablar del tema en estos momentos.
Yo no creo, pero no quisiera entrar en esa discusión, porque no quiero abrir una cuestión interna que es un tema que toca a los universitarios resolver, por supuesto. Y bueno, habrá que, si así se pretende, tocará hacer un gran consenso en lo que uno quiere en la Ley Orgánica. Yo tengo mi opinión muy personal y, en su momento, cuando se abra esto, lo diré, con firmeza lo que yo pienso: las fortalezas que tiene nuestra Ley Orgánica y no dudaría en expresarlo con toda libertad”, expone.
Aplaude, en ese sentido, la ampliación del periodo en el que la Junta de Gobierno se entrevistará con la comunidad universitaria.
Cinco semanas más, de hecho. Y yo comenté con ellos la importancia de que se entrevistaran con los representantes electos, en forma directa, para que tuvieran esa otra voz también. Y lo empezaron a hacer, lo van a empezar hacer mañana (jueves), en las comisiones, en las distintas comisiones del Consejo Universitario, a lo largo de estos siguientes días. Y después con los consejos académicos de área”, adelantó Enrique Graue.
En días pasados, 300 universitarios se pronunciaron por abrir más a la comunidad el proceso del relevo en la Rectoría.
Llama a los alumnos a involucrarse en sucesión
Los invitó a participar con responsabilidad en este proceso y así fortalecer a la casa de estudios
Con la advertencia de que existen pretensiones desestabilizadoras en la UNAM, el rector Enrique Graue pidió a los alumnos universitarios que recién ingresaron a la máxima casa de estudios conocer la legislación y participar con responsabilidad en el proceso de sucesión que arrancó el lunes pasado.
Esta generación que ingresa coincide con un momento crucial para la UNAM; una institución que, sin hegemonías ideológicas, está volcada hacia la docencia, a la investigación y a la extensión de la cultura y que, de acuerdo a su normatividad, ha iniciado ya el proceso del relevo de la Rectoría”.
El martes, Excélsior publicó que el proceso de sucesión en la UNAM arranca en medio del desconocimiento por parte de los estudiantes, del nombre, incluso, del rector actual, además de cómo se elige al jefe nato de la institución, cuánto dura su gestión y qué requisitos debe cumplir, entre otros aspectos.
Tras un recorrido por diversas facultades encontró que, sin importar la carrera y el semestre en el que se encuentren, la mayoría no sabe que en noviembre tendrán un nuevo rector o rectora.
Jóvenes yo los invito a conocer nuestra legislación y a estar atentos y atentas a pretensiones desestabilizadoras; a participar con responsabilidad en este proceso y así fortalecer a nuestra casa de estudios y con ello, por supuesto nuestro país”, exhortó Graue este miércoles durante la Ceremonia de apertura del Ciclo Escolar 2023-2024.
El rector también les dijo a los alumnos de nuevo ingreso que tengan muy presente que la UNAM está comprometida con la igualdad y con la erradicación de la violencia de género, que es inaceptable e intolerable entre los universitarios, en cualquier sociedad y en cualquier contexto.
Si algunos o algunas de ustedes se llegaran a sentir violentados, no duden en acudir a la Defensoría de los Derechos Universitarios, Igualdad y Atención de la Violencia de Género, que siempre estarán dispuestos a atender estos casos”, aseguró
Al dirigirse por última ocasión a las y los alumnos de nuevo ingreso, destacó que los mecanismos que la Universidad se ha impuesto para el ingreso y selección son los mejores.
Son casi noventa mil de ustedes, los que ingresan en los distintos niveles educativos, y se integran a esta comunidad entusiasta y vibrante, que se acerca a los casi trescientos ochenta mil estudiantes, lo que efectivamente la hace la más grande de Iberoamérica y una de las más grandes del mundo.
Con su llegada, aumentamos nuestra cobertura educativa en casi el 10% en relación con el ciclo escolar de hace 8 años. Esto implica la creación, en los últimos ocho años, de poco más de treinta y tres mil nuevos lugares. En el mismo periodo, para satisfacer las necesidades del mundo actual, ampliamos nuestra oferta académica con dieciocho nuevas licenciaturas e incrementamos en más de 90% el número de becas otorgadas en los múltiples programas con los que cuenta la UNAM”, detalló.
En este contexto, Graue invitó a los estudiantes a sentirse muy orgullosos de pertenecer a la Universidad.
Una Universidad que da una identidad única, que tiene el corazón azul y la piel dorada, y con pumas que rugen cada vez más alto, seguros de sus valores y convicciones”, concluyó.