Revelan los secretos de la etnia gunadule
Una exposición introduce a la cultura, la cosmovisión, la identidad y las costumbres cotidianas de esta comunidad panameña.
¿Cuál es la situación de la etnia panameña gunadule, reconocida como la primera autonomía indígena latinoamericana, en el mundo global contemporáneo?
A esta pregunta intenta responder la exposición Gunadule. Mujeres, cartografías textiles y saberes territoriales, que se inaugurará en el Museo Nacional de las Culturas del Mundo el 9 de noviembre, a las 13:00 horas.
Organizada en colaboración con la Embajada de Panamá en México y dividida en cuatro módulos, la exposición echa luz sobre la cosmovisión, los rituales y la forma de vida tradicional del pueblo gunadule; y dialoga con situaciones como el cambio climático, el impacto del turismo, la globalización, los derechos intelectuales de los pueblos indígenas o el liderazgo de las mujeres en sus comunidades.
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La iniciativa, informó el museo en un comunicado, destaca cómo esta comunidad “se ha esforzado por la conservación de su cultura, tradiciones y territorio, sin dejar de participar en las dinámicas y problemáticas internacionales”.
Bajo esta premisa, se introduce desde 1925 a esta nación transfronteriza panameña-colombiana: la defensa de su identidad, su organización social comunitaria y matrilocal, la relación biocultural con el territorio, la cosmovisión en sus textiles “molas”, sus prácticas de curación del chamanismo, los ritos de paso femeninos y las luchas por la autonomía, propiedad intelectual y medio ambiente.
Se exhibe parte de la colección que el recinto alberga desde 1975, gracias a la donación del investigador Julio César Schara, exagregado cultural de México en Panamá: piezas etnográficas, textiles de diversos tipos, herramientas y objetos de la vida cotidiana, esculturas, instrumentos rituales y fotografías.
El primer módulo, Nosotros, los gunadule, se detalla en el documento, contextualiza en su demografía y ubicación, una población con más de 80 mil integrantes, distribuida entre Panamá y Colombia. Y se describe su organización social, basada en casas comunitarias y en la propiedad matrilocal (donde los hombres se incorporan a la familia de la esposa).
En el segundo núcleo, Bab igar. El camino de Baba y Nana, se desarrollan sus creencias y prácticas espirituales; el tercer bloque, Omegan. Mujeres, recorre los tres ritos de paso femeninos obligatorios, conocidos como “chichas”; y el cuarto módulo, Los lazos de los gunadule con el mundo, descubre a una comunidad históricamente conectada.
