Maggie Smith, simplemente inolvidable; la actriz falleció a los 89 años
La actriz británica, quien se inmortalizó por sus roles como la profesora Minerva McGonagall en Harry Potter y la condesa Violet Crawley en Downton Abbey, falleció ayer a los 89 años
Maggie Smith se ganó el corazón de toda una generación con Harry Potter, de otras tantas con Downton Abbey y así con cada respectivo título en el que participó, pues lo cierto era que sin importar en qué papel o proyecto se presentara, destacaba.
Smith era de esas actrices que sabía dejar el alma en cada papel, haciéndose de un nombre que fue ganándose un lugar y respeto en la industria no sólo por su nivel con una interpretación impecable, sino por su elegante y amorosa personalidad que hacía que pudieras conectar con ella al instante.
Es por eso qué más allá de sus reconocimientos entre los que sumó dos Oscar, tres Emmy y múltiples más dedicados a su talento, la estrella de 89 años se ganó lo que muchos añoran: el cariño y devoción de miles de espectadores que quedaron atónitos con su talento y por eso es que su partida, anunciada el día de ayer, pesó tanto.
Dame Maggie Smith se fue de manera pacífica esta mañana (ayer). Como una persona sumamente privada estuvo acompañada sólo de sus amigos y familiares hasta el final. Deja a sus dos hijos y cinco muy amados nietos que están devastados por la pérdida de una extraordinaria madre y abuela.
Queremos aprovechar esta oportunidad para agradecer al maravilloso equipo del Hospital
Chelsea and Westminster por sus cuidados y extrema bondad en sus últimos días”, escribieron sus hijos Toby Stephens y Chris Larkin en un comunicado.
ACTRIZ DE TABLAS
La actriz británica deslumbró en puestas en escena como Mary, Mary, Hedda Gabler, Othello, Private Lives, Night and Day y Lettice and Lovage, mientras que en el cine se dio a conocer con títulos como The Prime of Miss Jean Brodie, California Suite, A Room With a View, Travels With My Aunt, Hot Millions, A Private Function, Gosford Park, The Best Exotic Marigold Hotel y su secuela.
Aunque fueron dos los proyectos que finalmente inmortalizaron su trabajo: Downton Abbey, la exitosa serie que protagonizó desde 2010 y por la que fue ganadora de dos Emmy y nominada a otros dos por su rol de la condesa Violet Crawley.
El programa fue tan exitoso que en 2019 estrenó su película en la que (spoiler) también pudimos despedirnos de ella a través de su personaje.
La pérdida es aún más grande para los fans de Harry Potter a quienes conquistó desde 2001 en el rol de la profesora Minerva McGonagall, fiel defensora de Potter y mano derecha de Dumbledore, quien destacaba por ser severa, pero también por su humor sarcástico y su valentía para poner en su lugar a todo el que quisiera pasarse de listo.
Para 1990, Smith fue nombrada Dama de la Orden del Imperio Británico, título y honor que sólo porta un escaso grupo de actrices como Judi Dench y Diana Rigg.
Smith nació en Ilford, Essex, y estudió en una escuela para niñas en Oxford antes de sumarse a las aulas de la Oxford School Playhouse. Para 1952 ya figuraba en producciones de la Oxford U donde tuvo su primera gira con la obra On the Fridge; fue ahí donde el productor estadunidense Leonard Sillman la invitó a sumarse a Broadway en el show New Faces of 1956.
En el cine arrancó con un filme pequeño titulado Nowhere to go, pero su impulso lo obtuvo gracias a su participación en The V.I.Ps, película protagonizada por Elizabeth Taylor y Richard Burton.
Más tarde su colega Laurence Olivier la invitó a unirse a la compañía nacional de teatro en Londres, donde fue alabada por su interpretación de Desdémona en la obra Otelo, misma que más adelante le daría una nominación al Oscar por su versión en largometraje.
Con su prestigio en 1969 fue elegida para protagonizar el filme La primavera de una solterona llevándose el Oscar a Mejor Actriz.
Con Viajes con mi tía obtuvo una nominación al Oscar, pero su segunda estatuilla dorada llegó con California Suite como Mejor Actriz de Reparto.
A mediados de los 80 la admiración y reconocimiento a su trabajo siguió creciendo bajo títulos como A Private Function y A Room With a View, con la que obtuvo su quinta nominación al Oscar.
En 1988 Smith fue diagnosticada con la enfermedad de Graves, un trastorno autoinmunitario que ocurre cuando el sistema de defensas ataca por error el tejido sano. Su condición la hizo tener que frenar la frecuencia con la que trabajaba y evitar hacer temporadas largas, aún así continuó ofreciendo interpretaciones a la altura como Three Tall Women desde Londres en 1994.
Al cine también sumó nuevos largometrajes como Hook, de Steven Spielberg; Cambio de hábito, El club de las divorciadas, Richard III —junto a la explosiva interpretación de Ian McKellen—, It All Came True, junto a Michael Cane, y Té con Mussolini, con Cher.
En 2003 finalmente se llevó el prestigioso premio de la TV con la producción de HBO My House in Umbria; en 2010 fue nominada una vez más por Capturing Mary, y después se ganó dos más por su rol como la condesa Violet en Downton Abbey.
En 2001 fue presentada como la inolvidable profesora Minerva McGonagall de la saga de Harry Potter.
Entre este mundo mágico fue que la actriz fue diagnosticada con cáncer de mama a sus 74 años, sin embargo, se recuperó y regresó a trabajar.
Su talento también quedó grabado en otras producciones como El exótico Hotel Marigold y su secuela, Quartet y My Old Lady; también exploró el doblaje con el filme animado Gnomeo y Julieta.
En 1967 se casó con el también actor Robert Stephens con quien tuvo a sus hijos Chris Larkin y Toby Stephens, tras divorciarse de este en 1976 se casó una vez más con el escritor Beverley Cross.
Deslumbrante
- Participó en más de 86 producciones.
- Obtuvo más de 50 reconocimientos.
- Recibió dos premios Oscar.
- Tres premios Emmy.
- Un premio BAFTA.
- Un premio Tony.