Sonido de libertad, un fenómeno en taquilla
El filme del mexicano Alejandro Monteverde, que evidencia el tráfico infantil, así como la prostitución de niños y niñas, ha desbancado blockbusters en EU
La película Sonido de libertad, que, basada en un hecho real, aborda el tema del tráfico sexual de menores, se convirtió en un fenómeno de taquilla en Estados Unidos y Canadá que logró desbancar con 177.7 millones de dólares lo realizado en dichos territorios tanto por Misión: Imposible. Sentencia Mortal. Parte Uno, que ahí recaudó 164.9 millones de dólares, o Indiana Jones y el dial del destino, que acumuló 173.6 mdd. Alejandro Monteverde, director mexicano detrás de esta cinta producida entre otros por Eduardo Verástegui y Patricio Slim Domit, cree que lo que ha sucedido con su película tiene que ver con el fenómeno de “boca en boca”.
Creo que la audiencia tiene hambre de contenido importante, contenido con significado, contenido que, de cierta forma, nos invite a crear diálogos que puedan crear cambios. Yo creo que fue una combinación de una película con la que la audiencia conectó, que los conmovió y que disfrutaron, pues al final de cuentas sigue siendo cine con la combinación de la importancia de la temática. Creo que esos dos elementos hicieron que la audiencia, después de ver la película, fueran conmovidas para empezar a promoverla, a crear ese de ‘boca en boca’. Rompió todas las expectativas, yo pensé que la película ni siquiera iba a estrenarse en cine porque yo la acabé en 2019 y de pronto se estrena en Estados Unidos y Canadá, logrando 177 millones, es una locura. Para mí hubiera sido un éxito si la película hubiera hecho diez millones, eso pensé que iba a hacer y se convirtió en todo un fenómeno”, relató en entrevista con Excélsior, Alejandro Monteverde.
La inspiración de este filme, que se estrenará en salas comerciales de nuestro país el 31 de agosto, se dio luego de que Monteverde viera un reportaje sobre la producción de videos de abuso sexual infantil, así como de la trata de niños. Tras varias pesquisas y darle forma a una idea de guion, Monteverde se acercó a Eduardo Verástegui, actor con el que ha hecho mancuerna en cintas como Bella y El gran pequeño, para invitarlo a recaudar el dinero que se iba a necesitar para producirla y es él quien le habla y presenta a Tim Ballard, exagente federal estadunidense que rescató en Colombia a más de 120 víctimas de abuso, trata y pornografía infantil y arrestó a varios traficantes. A partir de ese encuentro y de su historia, Monteverde modifica su guion y le da forma a la película que se ha convertido en fenómeno de taquilla.
Para mí era importantísimo hablar de este tema. Los niños son la inocencia del mundo, es el núcleo inocente de nuestro mundo y para mí, los niños no deberían tener nacionalidad, pues deberían de pertenecerle al mundo. Así como pasó con las ballenas (asesinadas) en Japón y que el mundo enteró se juntó para protegerlas, así debería pasar con nuestras infancias, así debe ser cuando a un niño en Haití lo están violando cinco veces al día. Este tendría que ser un problema mundial, tenemos que parar esto. Recuerdo que cuando estaba escribiendo la película e iba a cenas con mi esposa, yo arruinaba las fiestas, pues cuando me preguntaban en qué estaba trabajando, empezaba a hablar de la temática y a la gente le daba el apagón. Ahí me di cuenta de la importancia del tema, de cómo la gente se tomaba muy en serio esto y de cómo se daba un diálogo”, contó el tamaulipeco.
Sonido de libertad es protagonizada por Jim Caviezel, conocido por su papel de Jesucristo en la cinta La pasión de Cristo, dirigida por Mel Gibson, y quien aquí le da vida al agente estadunidense Tim Ballard, quien, tras la detención de un pedófilo, el 288 de su carrera, le sigue la pista a un par de hermanos, un niño y una niña centroamericanos, que fueron secuestrados, trasladados y prostituidos en Colombia. Apoyado por su familia y luego de rescatar al niño, Tim Ballard decide viajar a Colombia y rescatar a la niña.
Mucho de lo que hemos escuchado desde el estreno del filme es ‘gracias por tener el valor’. Humildemente digo que no me merezco esas gracias porque a mí me encanta a hacer cine y lo único que hice fue escuchar ese llamado. Al día siguiente de aquel encuentro con Tim desperté con ese ‘hey, tienes que hacer algo con esto’. Nuestra película está abriendo un diálogo muy importante y ha abierto muchas puertas para empezar a platicar de esto. Tengo un buen amigo que fue abusado de niño y nunca me lo hubiera contado, pero se abrió, me dijo que fue su tío y que sus papás no le creyeron, entonces, creo que ahora con este diálogo los padres van a tomar más en serio eso y cuando llegue un hijo y le diga que alguien le está haciendo cosas inapropiadas, se va a tomar en serio la idea de proteger a los niños”, reflexionó el realizador de 46 años.
Con respecto a la mancuerna laboral que ha hecho con el actor Eduardo Verástegui —quien ha generado controversia debido a su postura de ultraderecha y quien en abril pasado fue criticado por haber escrito en el entonces Twitter que “la homosexualidad está vinculada con la pedofilia”—, Monteverde contó que Verástegui es un aliado para hacer posibles las historias que generen conciencia.
A Eduardo siempre le ha importado ser parte de proyectos que creen conciencia y un cambio. Yo sabía que a Eduardo le iba a interesar porque es un proyecto humanitario, él fue el que ayudó a recaudar los fondos y a producir la película”, acotó Monteverde.
Sonido de libertad, coproducción entre México y Estados Unidos, cuenta en su elenco con Mira Sorvino, Bill Camp, Cristal Aparicio, Eduardo Verástegui, Javier Godino, Gustavo Sánchez Parra, Gerardo Taracena y Yessica Borroto.
El Escándalo
A principios de agosto se dio a conocer que el empresario estadunidense Fabian Marta, uno de los hombres que donó dinero a Sonido de libertad a través de un crowdfunding (que consiste en obtener fondos en línea para financiar un proyecto, en este caso para ayudar la distribución del filme) fue arrestado por secuestro de menores en Saint Louis, Missouri. La historia acaparó la atención de los medios y mucha gente criticó que el filme tuviera entre sus aportantes a una persona con dicho historial.
La película fue financiada por empresarios americanos (sic) y mexicanos y la distribución contó con el apoyo de siete mil personas que donaron desde diez y creo que hasta 100 dólares, que era lo máximo, para ayudar a la distribución. No puedes controlar lo que puedan hacer esas siete mil personas. ¿Cuánto dinero puso? No lo sé, pueden ser diez dólares o puedo haber dado el máximo, no lo sé. De cierta forma ese hecho lo usaron muchos por maldad para querer desviar el tema”, comentó Monteverde.
Ante la pregunta de si se eliminará el crédito en el filme del donante en cuestión, Monteverde comentó: “Creo que lo quitaron. Son siete mil créditos y él es alguien muy alejado del proyecto que no tuvo voz. Es como, por ejemplo, el dueño de una sala de cine en donde pasan la película está en la cárcel por tal cosa, él es dueño de la sala y no tiene nada que ver con el grupo que creó la película”, remató.