Héctor Hernández Bringas propone revolucionar modelo educativo
El doctor en ciencias sociales aseguró que la Universidad necesita nuevos planes pedagógicos que puedan vincular al alumno con el mercado laboral
A través del diálogo y el consenso, pero nunca de la imposición, Héctor Hernández Bringas, aspirante a la Rectoría de la UNAM, dijo que está totalmente dispuesto a entrarle a temas como la reforma al Estatuto del Personal Académico, que rige las relaciones de los académicos con la institución, así como a la actualización de los modelos educativos, para llevar hacia adelante a una Universidad que se ha quedado “paralizada”.
Quiero ser rector para impulsar una serie de cambios, ajustes y modificaciones que no se han hecho y que hacen que la Universidad no haya progresado en diversos aspectos; realmente ha habido poco intento por modificar ciertas condiciones y a mí me parece importante que la Universidad se mueva hacia adelante, tenemos que ir hacia una Universidad que esté al día, que esté en el siglo XXI porque nos hemos quedado con esquemas un poco atrasados en muchos sentidos.
De entrada en el tema de la educación, hoy tenemos una docencia que hace que los alumnos sean solamente receptivos ante lo que dicte un catedrático, si bien nos va, el profesor pone un PowerPoint; la gente se duerme, no se interesa, no participa y creo que estos esquemas particularmente en el bachillerato tienen que ser revisados y tenemos que ir a un modelo docente mucho más participativo, mucho más activo, que permita que los alumnos tengan un real interés en la docencia, que se vuelvan a interesar en ir a la escuela, en ir a la Universidad, en ir al bachillerato”, destacó.
En entrevista con Excélsior, Hernández Bringas explicó que los nuevos modelos pedagógicos deben además vincular al alumno con el mercado de trabajo y con los problemas de la realidad social, para que el conocimiento que se les transmita sea pertinente y tenga sentido.
Al referirse a la situación de los profesores de asignatura y técnicos académicos, Hernández Bringas, quien durante el rectorado de Juan Ramón de la Fuente fue nombrado como coordinador de los trabajos del Congreso Universitario, planteó que se tiene que revisar, por ejemplo, cómo se define su carrera académica.
Hay que cambiar esto, hay que modernizarlo, yo estoy dispuesto a emprender una labor por la reforma del Estatuto del Personal Académico y son este tipo de cosas que yo creo que hay que mover y que nadie ha querido entrarle, porque se teme un proceso de politización, se teme que el proceso se vaya de las manos, pero yo creo que llevándolo adecuadamente y en un ejercicio de acercamiento con la comunidad, de diálogo, de establecimiento de consensos y de acuerdos se puede hacer, hay que mover inercias. ¿Habrá resistencia al cambio?, sí, como en todo cambio, pero yo tengo experiencia en eso, yo lo puedo promover sin crear disrupciones al interior de la Universidad, sin crear rompimientos”, aseguró.
Héctor Hernández, quien ha sido colaborador de los exrectores José Sarukhán, Francisco Barnés, Juan Ramón de la Fuente y José Narro, dejó en claro que no tiene ningún padrino y busca la Rectoría de la Universidad, por segunda ocasión, como un universitario absolutamente independiente, que no está ligado a ningún interés, más que al de mejorar a la Universidad Nacional.
Como excoordinador de Planeación, Presupuestación y Evaluación, consideró fundamental el establecimiento de puentes de diálogo con el gobierno federal y el poder Legislativo para lograr hacerles entender la importancia que tiene el presupuesto universitario.
A mí me tocó hacer este ejercicio cada año, no era fácil, siempre de entrada, parecía haber golpes presupuestales a la Universidad y hay que estar ahí, hay que estar reuniéndose y en una
actitud de defensa muy firme de los recursos de la máxima casa de estudios, pero esto se hace con diálogo, no hay otra manera, hoy lamentablemente, pues la relación no es la mejor. Y creo que hay que mejorarla, entre otras cosas, para lograr un buen
presupuesto”, comentó.
Respecto a la relación con los gobiernos de los distintos niveles, Hernández Bringas, expuso que con pleno apego a su autonomía, la Universidad Nacional siempre debe estar abierta la colaboración y tomar las buenas causas en favor del pueblo de México.
Finalmente no es someternos a un gobierno, es realizar proyectos y acciones concretas en beneficio de las poblaciones. La autonomía hay que defenderla así, en materia de libertad, investigación y de docencia, hay que defenderla en la forma en que nos gobernamos, hay que defenderla en el manejo de nuestros recursos, pero esto no debe significar la imposibilidad de establecer un diálogo abierto con las autoridades de este país, legítimamente constituidas sean de un partido o sean de otro”, aclaró.
HAY QUE TENER PIEL PUMA PARA SER RECTOR
Para el sociólogo, un rector debe tener sensibilidad universitaria, una “piel puma”, que le permita saber cómo son sus colegas, cómo piensan y cómo reaccionan a los diversos problemas. Además capacidad de escucha para conocer las necesidades de la comunidad y también de negociación.
Más allá de los cargos administrativos que ha desempeñado, destacó que su formación desde el área de humanidades le ofrece a la UNAM su vocación de servicio.
Creo que el ser sociólogo y por lo menos, ése es mi caso particular, te da una sensibilidad muy especial respecto de los problemas que se viven en las poblaciones y se viven en las comunidades, ése ha sido mi interés académico de toda la vida, justo ver, analizar y proponer acciones para la superación de las injusticias, para la superación de la pobreza y para mejorar la situación de niños, de personas mayores, de grupos en situación de vulnerabilidad. Es por eso, tal vez, que mi proyecto fundamental en la Universidad se oriente a la solución de problemas que tienen que ver con inequidades al interior.
Yo veo inequidades y veo la necesidad urgente de poder superarlas porque esto nos va a permitir crecer académicamente y tener una mejor gobernabilidad, yo creo que sí, mi formación influye de manera decidida y determinante en mi visión de la propia Universidad, que requiere un proceso de transformación y renovación de muchas de sus formas de organizarse, así como de su estructura administrativa para eliminar los privilegios de la burocracia universitaria”, detalló.
Tras la experiencia que adquirió durante la pandemia de covid-19, en la que se dedicó a retratar el perfil sociodemográfico de las muertes causadas por el virus, Hernández Bringas tiene claro que aún no se conocen bien los efectos de la crisis en la población y se deben redoblar esfuerzos para brindar atención a los universitarios.
En materia educativa, claro que hubo rezago, claro que hubo efectos emocionales en los jóvenes y esto hay que atenderlo de manera muy urgente y no dejarlo así como si nada hubiera pasado. También en materia de investigación hay que instrumentar líneas que tengan que ver con este tipo de fenómenos emergentes, entre ellos las pandemias, para estar preparados ante situaciones de catástrofe”, explicó.
BIENVENIDO EL DEBATE EN LA UNIVERSIDAD
Al hablar sobre el contexto político del país, manifestó que sería deseable atreverse a que los candidatos acudan a la Universidad Nacional.
Nos da miedo, es cierto, hay temor de que haya movilizaciones, de que haya violencia, pero yo creo que no, yo creo que el país ha vivido un proceso democrático en los últimos 20 años y me parece que la comunidad universitaria es muy madura, y creo que debemos aceptar ser parte de este debate nacional, en un tema tan importante como las campañas políticas”, finalizó.